La esofagitis eosinofílica (EoE) es una afección inflamatoria crónica que afecta el esófago, el tubo que conecta la boca con el estómago. Si bien los inhibidores de la bomba de protones (IBP) suelen ser la primera línea de tratamiento, no funcionan para todos. Este artículo analiza lo que sucede cuando los IPP no son suficientes y qué enfoques alternativos existen.
Por qué los IBP a veces no son suficientes
Los IBP generalmente se recetan para la EEo no para reducir el ácido del estómago, sino por sus propiedades antiinflamatorias. Sin embargo, varios factores pueden limitar su eficacia.
El uso inconsistente, las diferencias genéticas en la forma en que el cuerpo procesa los medicamentos o las condiciones alérgicas subyacentes pueden hacer que la inflamación sea más difícil de controlar. Es posible que algunas personas tampoco puedan tomar IBP debido a interacciones con otros medicamentos o condiciones de salud preexistentes. Si no responde a los IBP o si se confirma la inflamación mediante una endoscopia a pesar de tomarlos, hay otras opciones disponibles.
Próximos pasos: esteroides y más
Si los IBP fallan, los médicos suelen recurrir a esteroides tópicos, formas líquidas diseñadas para cubrir el esófago directamente. Las opciones comunes incluyen budesonida (Eohilia), fluticasona (Flonase, Flovent) y ciclesonida (Alvesco).
Estos medicamentos calman la respuesta inmune en el esófago. Los estudios demuestran que reducen significativamente la inflamación y pueden inducir la remisión en muchos pacientes. En casos graves, se pueden usar esteroides sistémicos (orales, inyectados o intravenosos), pero conllevan riesgos como aumento de peso, cambios de humor y presión arterial alta, por lo que se reservan para uso a corto plazo, especialmente en niños.
Los esteroides tópicos orales como la budesonida generalmente tienen un buen perfil de seguridad, siendo el efecto secundario más común una candidiasis leve en el esófago.
Cuándo buscar atención médica
No ignore el empeoramiento de los síntomas. Comuníquese con su gastroenterólogo si experimenta:
- Dificultad para tragar (disfagia)
- La comida se atasca
- Dolor en el pecho
- Pérdida de peso inexplicable
Estos podrían indicar que la enfermedad no está bajo control, lo que provoca complicaciones como estrechamiento del esófago o mala nutrición. Incluso si los síntomas mejoran, las endoscopias de seguimiento periódicas son esenciales porque la inflamación puede persistir silenciosamente y provocar cicatrices con el tiempo.
El resultado final
Si los IBP no funcionan para su EoE, es posible que sean necesarios esteroides ingeridos u otras terapias dirigidas. Mantener una comunicación regular con su proveedor de atención médica y asistir a citas de seguimiento es crucial para el manejo a largo plazo. Ignorar los síntomas puede permitir que la inflamación progrese y provocar complicaciones graves.
































